Hein?

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...y yo en el pinche Tren Suburbano chocón.

Andaba yo por las lejanas tierras de Azcateasalto Azcapotzalco, específicamente en la estación de Fortuna del tren suburbano, con los audífonos puestos, oyendo al secretario de salud en su conferencia de prensa y de pronto, ¡sopas! El primer jalón. Como soy medio torpe y pierdo el equilibrio bastante seguido, cuando creo que está temblando lo primero que hago es buscar un punto de referencia, acto seguido, voltee a ver los cables de alimentación del tren que están colgados a unos 4 metros sobre el suelo. Cuando vi que estos se movían, busqué un segundo punto de referencia, las lámparas también se movían de un lado a otro.

Como suelo ser bastante, pero bastante paranoico, cuando confirmé que estaba temblando, lo primero que pensé es: ¿cómo salgo de aquí? Estaba yo bastante cerca de las escaleras, pero salir de las estaciones del suburbano por las escaleras no es una idea muy reconfortante, cualquiera que haya estado en una estación saben que para salir de ellas hay que recorrer distancias bastante largas siempre en una planta alta. Como no estaba muy convencido de querer salir de la estación recorriendo chorrocientosmil metros voltee a ver a los guardias de seguridad a ver si daban alguna instrucción, pero:


Así es, como diría el Sombrero Loco en la versión animada de Alicia en el país de las maravillas de Disney: nada de nada. Los guardias de seguridad ni se inmutaron. De pronto, cuando el sismo ya había acabado, en el sonido de la estación se emitió una alerta:

Atención a los guardias de seguridad por sismo.

¿Pero ya p'a qué? El pinche temblor ya había acabado. Si un sismo es que las placas tectónicas están teniendo relaciones sexuales, para cuando se emitió el aviso ya hasta se habían acabado el cigarrillo post-coital. Así de tarde fue.

Chale. El miércoles a primera hora -cuando vaya al suburbano nuevamente-, me quejaré con el jefe de estación. No es posible tal desorganización: ni una alarma, ni instrucciones por los elementos de seguridad, ni salidas de emergencia cercanas... esto me huele a queja ruda.

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