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El post pasado causó uno de los comentarios mas acertados hasta el momento. Este comentario provino de una de mis excompañeras de la preparatoria con la cual aun continuo conversaciones esporádicas.
Luna, como la llamaré para mantener su anonimato, me hizo ver que me estaba refugiando en las faldas de mi madre, cual escolar de 5 años. No solo no me estaba haciendo responsable de mis acciones, pensamientos y sobre todo, de mis palabras; la estaba culpando a ella de mis procederes.
Para enmendar este error agregaré una frase la cual suelo decir:
- ¡Duras no son las palabras, frágiles las mentes que las interpretan!
Si lo recapacitan, es cierto. Pero cierto también es, que las reacciones provocadas por las palabras son responsabilidad de quien las pronunció. Aun cuando no desee o no pueda lidiar con ellas.
Una de las grandes verdades de la vida revelada en mi paso por la educación superior fue: si recibes una agresión verbal, no existe ninguna justificación para que la respuesta a esta, sea una agresión física.
Si lo recapacitan un poco -otra vez-, verán que también es cierto. Ejemplo:
Si alguien te dice:
-Idiota.
Tu le respondes:
-Imbécil (o simplemente lo tildas por loco y lo ignoras).
Pero si vas y golpeas, lo que estas demostrando es frustración e impotencia. ¿Por qué llevar la discusión al siguiente nivel (el físico)? ¿No es acaso denigrarse? ¿Cuántas peleas pudieron haberse evitado de esta forma?
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El post pasado causó uno de los comentarios mas acertados hasta el momento. Este comentario provino de una de mis excompañeras de la preparatoria con la cual aun continuo conversaciones esporádicas.
Luna, como la llamaré para mantener su anonimato, me hizo ver que me estaba refugiando en las faldas de mi madre, cual escolar de 5 años. No solo no me estaba haciendo responsable de mis acciones, pensamientos y sobre todo, de mis palabras; la estaba culpando a ella de mis procederes.
Para enmendar este error agregaré una frase la cual suelo decir:
- ¡Duras no son las palabras, frágiles las mentes que las interpretan!
Si lo recapacitan, es cierto. Pero cierto también es, que las reacciones provocadas por las palabras son responsabilidad de quien las pronunció. Aun cuando no desee o no pueda lidiar con ellas.
Una de las grandes verdades de la vida revelada en mi paso por la educación superior fue: si recibes una agresión verbal, no existe ninguna justificación para que la respuesta a esta, sea una agresión física.
Si lo recapacitan un poco -otra vez-, verán que también es cierto. Ejemplo:
Si alguien te dice:
-Idiota.
Tu le respondes:
-Imbécil (o simplemente lo tildas por loco y lo ignoras).
Pero si vas y golpeas, lo que estas demostrando es frustración e impotencia. ¿Por qué llevar la discusión al siguiente nivel (el físico)? ¿No es acaso denigrarse? ¿Cuántas peleas pudieron haberse evitado de esta forma?
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1 Rumor(es):
Cierto!
Pero es inverosímil (y bastante triste ) la cantidad de mentes débiles que en lugar de dirigir esa fuerza que emplean en la frustración, hacia el raciociono, cuántos problemas no resolveríamos.
Por cierto, si hubieras pasado antes a saludar, hubieras visto que he cambiado varias veces de libro.
Un beso muy grande de Niobe :P
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